sábado, 13 de noviembre de 2010

Bogotá I

Siempre ocurre igual, después del viaje llego muerto a la habitación y un resorte interno termina haciéndome salir para darle un tiento a la nueva ciudad anochecida.

He visto el Septimazo, actividad participativa en la calle 7a, desde vender artesanía, pasando por comida rápida, hasta actuaciones de malabares o de grupos de música. Toda la calle llena de ganas de vivir.

Me sorprendió mucha policía, pintadas revolucionarias (por qué en América parece tan posible la utopía?), tres jóvenes en medio de la calle golpeando a otro haciendo ruidos sordos, dos borrachos jugando a ajedrez...

Estoy en Alterego Hostel, estratégicamente situado en el barrio colonial de la Candelaria, nada del otro mundo pero muy atentos, cama por 9 euros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario