jueves, 8 de diciembre de 2011

RIchter - Rembrandt

Hubo un tiempo en el que el cerebro era un dictador todopoderoso, la única voz autorizada del cuerpo, hasta que la actual tendencia holística y descentralizada reclamó la necesidad de consenso entre todas las vísceras, especialmente el corazón. Pero ¿qué hacer cuando todos los órganos desmienten a la mente? Una solución práctica es buscar intermediarios como la creatividad.

Hay gente que piensa que el arte no sirve para mucho. A mí me da los hilos que tirando traen respuestas, es el chamán que me acompaña y me ayuda a entender esos conflictos. Por ejemplo Gerhard Richter me habla de un mundo bello pero inestable, titilante, de referencias acumuladas y difuminadas capa tras capa. Rembrandt sin embargo me muestra una perplejidad detenida, espacios interiores donde reflexionar en soledad sobre la fragilidad de la existencia. Nunca había llegado a sentirme tan cerca de estos cuadro como hoy.

2 comentarios:

  1. "Tenemos dos cerebros: el de la cabeza y el del estómago"

    http://www.lavanguardia.com/lacontra/20120206/54250340177/irina-matveikova-tenemos-dos-cerebros-cabeza-estomago.html

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  2. "El corazón tiene cerebro"

    http://www.lavanguardia.com/lacontra/20120314/54267641495/annie-marquier-corazon-cerebro.html

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